En un emocionante enfrentamiento, el Feyenoord logró una espectacular remontada en el Mandemarkers Stadion contra el Waalwijk (1-2). Este triunfo fue clave para el campeón, que venía de una derrota en la jornada anterior y necesitaba recuperarse para mantenerse en la carrera por el liderato, actualmente en manos del PSV Eindhoven, que previamente había ganado al Heracles.
Santi Giménez desaprovecha desde el punto de penalti
El partido se complicó para el Feyenoord cuando el Waalwijk se adelantó antes de la media hora con un gol de Denilho Cleonisek en un rápido contraataque. La tensión creció, y el Feyenoord necesitaba una respuesta inmediata. El equipo de Arne Slot logró igualar el marcador en el minuto 34 gracias a Quinten Timber, quien convirtió un pase de Bart Nieuwkoop en un gol crucial para mantener sus esperanzas vivas.
Un penalti decisivo que no pudo concretar
Justo antes del descanso, el Feyenoord tuvo una oportunidad de oro para tomar la delantera cuando el defensor belga Shawn Adewoye cometió un penalti y fue expulsado. El encargado de ejecutar la pena máxima fue Santi Giménez, quien optó por un lanzamiento estilo ‘panenka’, pero desafortunadamente, el balón se elevó por encima del travesaño.
El gol de la victoria y la recuperación de Feyenoord
El drama continuó en la segunda mitad, cuando un disparo desde fuera del área de Ramiz Zerrouki encontró una sólida respuesta de Mark Spenkeling. Sin embargo, Bart Nieuwkoop aprovechó el rebote y anotó el gol de la victoria para el Feyenoord, colocándolos en la tercera posición de la clasificación.
En un partido lleno de emociones y giros inesperados, el Feyenoord logró una remontada épica para asegurar tres puntos vitales y mantenerse en la lucha por el título de la liga. La valentía y determinación del equipo superaron el obstáculo del penalti fallado por Santi Giménez, lo que demuestra que en el fútbol, nunca se puede dar por perdido un partido hasta que suene el pitido final.
