Culminó la jornada 16 del futbol mexicano y con ella el aguerrido empate que hubo entre el América y Pumas dentro de otra edición mas del clásico capitalino en el que hubo de todo, broncas entre aficionados, expulsiones, juego muy físico, un cuadro universitario inspirado y unas águilas carentes.
El ave venía de ganarle a Cruz Azul y, Pumas venía de una importante victoria contra el equipo de Toluca, los del Tano partían como favoritos por el gran fútbol que han venido mostrando desde que el argentino asumió el mando del equipo y por su parte el equipo del pedregal si bien no lo colocaban como el vencedor del juego, en la opinión publica se recalcaba que el equipo de Mohamed daría batalla.
Siempre un espectáculo
El clásico capitalino siempre será un escenario en el que los encuentros previos no tengan relevancia, el llegar a este partido donde te juegas mas que 3 puntos, el orgullo de no perder contra uno de tus máximos enemigos hace que así llegues de ultimo en la general, des pelea a morir.
Esta edición entre universitarios y amarillos no sería la excepción tras el aguerrido empate de marcador 1-1 que presentaron, en el primer tiempo no hubo mucho de que hablar debido a que ambos equipos se prestaban mas a cerrar sus porterías y protegerse de las embestidas rivales, lo recalcable de los primeros 45 minutos fue la expulsión del técnico de la UNAM Mohamed tras reclamarle al asistente del cuerpo arbitral.
Un segundo tiempo intenso
Fue hasta el segundo tiempo que los 22 protagonistas salieron mas a proponer en especial el equipo azul y oro contando con la iniciativa del encuentro mientras que del otro lado la tanoneta estaba sin idea clara de juego aún siendo ellos quienes tenían la Localia del azteca, fue entonces cuando el equipo de Pumas en un saque de esquina aprovechó una desatención águila defensiva y en colaboración con el defensa azulcrema Néstor Araujo se adelantaron en el marcador.
3 minutos le duró el gusto a la UNAM ya que también tras un saque de esquina pero a favor del ave el brasileño Diogo impactó la pierna del defensa americanista Caceres provocando la pena máxima para la universidad que posteriormente Henry Martín marcaría poniendo el 1-1 pintándole el goya a la afición Puma emulando a German Villa y también añadiendo el gol 14 para el yucateco en busca del titulo de goleo.
Al final ambos equipos presentaron llegadas pero el marcador no se movió y mientras que a la UNAM le sirvió este empate, el 1-1 generó descontento para la afición local.
