Alternativo.mx| Venezuela es uno de los países que integran la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), la única diferencia es que es el país con las mayores reservas de petróleo conocidas dentro de la organización. Sin embargo, esto hizo que la economía del país dependiera en un 90% del crudo; lo que provocó que ante la caída petrolera mundial, la economía venezolana cayera también. Añadiendo una crisis social que ha terminado en hambruna, golpes, desesperación e incluso muertes.
Para entender la crisis es necesario saber que en los años 90 Venezuela era una potencia entre los países suramericanos; lo malo era que esta riqueza se concentraba en una pequeña élite y existía una gran mayoría empobrecida que estaba furiosa por la situación. Hasta que en 1999 llega el socialismo al país junto a Hugo Chávez, quien para la población enfurecida se convirtió en “un salvador del pueblo”.
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El proyecto de Hugo Chávez consistió en separar sus asuntos de EUA y convertirse en aliado de Rusia y China, quienes le prestaron miles de millones de dólares que hasta la fecha se deben; el dinero lo implementó en programas sociales y asistencialismo; las tierras agrícolas se declararon parte del estado y luego fueron abandonadas, lo que provocó que la economía pasara a depender en su mayor parte del comercio petrolero.
En 2002 surge un Golpe de Estado contra Chávez donde murieron alrededor de 60 personas; en diciembre de ese mismo año, desde televisión nacional, importantes oficiales militares invitaron a la población a moverse contra el gobierno chavista. La huelga le costó al país 64 días violentos que dejaron una pérdida de 4,000 millones de dólares en ingresos.
Comenzaron las rivalidades entre quienes querían mantener a Chávez en el poder y los que lo querían fuera a toda costa. Chávez se reeligió tres veces, desde su entrada al poder, hasta que en marzo de 2013 murió de cáncer y ya para abril del mismo año, con un 50.8% de los votos a favor, Nicolás Maduro se había convertido en presidente electo.
Los disturbios, entre quienes apoyaban al gobierno de Maduro y la llamada “oposición”, se intensificaron dejando muertos y heridos por las calles venezolanas. La razón es que Maduro se enfrentó a la decisión entre apoyar a su gente o pagar la deuda externa, eligiendo la última opción Maduro provocó una crisis de abastecimiento en productos básicos de uso humano, desempleo, inflaciones, revueltas violentas y migración.
Sin duda alguna el proceso venezolano es un suceso que no solo ha afectado al país como tal, sino que representa la razón del movimiento de cientos de organizaciones que defienden derechos humanos en el mundo; además de algunos otros movimientos de potencias que quieren intervenir dentro del país y sabemos que no siempre es por ayudar a las personas; muchas veces es porque Venezuela representa un eje estratégico del petróleo mundial.
La crisis ha provocado un movimiento migratorio impresionante, la Organización de Naciones Unidas calcula que alrededor de 2,3 millones de personas han huido del país. Las razones de su lucha imparable son la necesidad de celebrar elecciones el próximo mes; liberar a los presos políticos y crear un canal humanitario para proveer a la gente de alimentos, que a mi parecer es lo más importante por ahora.
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Podríamos cuestionar el actuar de las potencias mundiales preguntándonos ¿por qué cuando se trata de violaciones a derechos humanos, no intervienen?; ¿Por qué cuando hay personas peleando por una botella de agua, se quedan mirando? Pero no pongamos en cuestión cuántas veces han intervenido arbitrariamente o excusándose de “defender la seguridad internacional”, en países que supuestamente tienen arsenal nuclear. Mi pregunta aquí es ¿por qué vale más un arma que la vida de una persona?
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