El colapso de un tramo de la Línea 12 del Metro fue provocado por una falla estructural asociada al menos a seis deficiencias en el proceso de construcción de la obra, revela el peritaje preliminar elaborado por la empresa noruega DNV y encargado por el Gobierno de la Ciudad de México.
De acuerdo con el documento preliminar, se trata de la soldadura de los pernos Nelson; porosidad y falta de fusión en la unión de pernos y trabe; falta de pernos en las trabes que conforman el conjunto del puente, además de diferentes tipos de concreto en la tableta; soldaduras no concluidas o mal ejecutadas y supervisión y control dimensional en soldaduras de filete.
El análisis técnico-científico determina la deformación en las trabes, en patines y almas que las conforman; también identificó roturas en almas de las trabes, perfiles de ángulo y placas de conexión.
El reporte agrega que de la revisión física y documental aún está en proceso la información complementaria de algunos puntos, como los relacionados con posibles reparaciones y rehabilitaciones realizadas con posterioridad a la construcción, así como el impacto de la operación cotidiana sobre la estructura del Metro.
La segunda fase del peritaje será entregada al gobierno capitalino el 14 julio y el 30 de agosto se entregará la tercera y última fase del documento de investigación y prueba.