Desde hace 7 meses que la NFL no vivía un susto muy fuerte como aquel golpe que recibió Damar Hamlin en el pecho el cual lo mantuvo debatiéndose por mucho tiempo entre la vida y la muerte, el día de ayer en el partido entre Patriots y Packers, el novato Isaiah Bolden pasó una situación un tanto similar y provocó en automático las alarmas evitando que surgiera otro episodio parecido.
Se jugaba el partido de pretemporada entre Green Bay y Nueva Inglaterra con toda la normalidad posible hasta que sucedió el susto enorme, empezando el ultimo cuarto el jugador Isaiah Bolden tuvo un fuerte encontronazo con otro de sus compañeros y en automático ese mismo golpe fue capaz de mandarlo al piso durante varios minutos sin poder moverse.
El novato de séptima ronda proveniente de la universidad de Jackson State tuvo la mala suerte de estrellarse con su compañero Calvin Munsonen una jugada rutinaria de pase relativamente sencilla, como la mayoría.
Un bolillo pal’ susto
Una vez que las asistencias medicas atendieron correctamente a Bolden, hubieron varios jugadores que decidieron dejar rodilla en tierra, otros mas entraron a vestidores y finalmente el cuerpo de salud hizo su trabajo y esta espantosa situación quedó simplemente en un gran pero simple susto.
Luego de que el novato fuera sacado del campo inmovilizado del cuello, a través de una consulta con ambos equipos decidieron no reanudar las acciones y finalmente suspender este encuentro que viene dentro de la preparación de cara a la próxima campaña a iniciarse el primer jueves del mes de septiembre.
Una de las razones que caracteriza a la NFL ante esta clase de sustos, es que afortunadamente estará preparada para poder actuar con los protocolos correspondientes ante esta clase de situaciones que requiera asistencia medica inmediata para no poder pasar a situaciones mas riesgosas.