La policía española anunció hoy la detención en Madrid del líder del cártel de los Zetas en Europa, un ciudadano marroquí conocido como Said. Este individuo había estado dirigiendo las operaciones del grupo criminal mexicano en la región durante varios años. Durante el operativo, las autoridades también incautaron 400 kilos de cocaína, que se sospecha provenían de España, así como 220 mil euros en efectivo, teléfonos móviles y material informático. Además del líder de los Zetas en Europa, se arrestó a cuatro personas más, tres colombianos y un dominicano.
“La operación policial fue llevada a cabo en colaboración entre los agentes españoles, la Policía Nacional de Colombia y la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional de Estados Unidos (EU). Según un portavoz de la policía española entrevistado por La Jornada, esta operación se considera la segunda más grande contra los clanes del narcotráfico mexicano en España, y ha logrado desmantelar la ramificación de los Zetas en Europa.
Las detenciones y confiscaciones tuvieron lugar en Madrid, la ciudad que el grupo criminal mexicano eligió como base para sus operaciones en Europa, principalmente en España y los Países Bajos. El vocero informó que los servicios de inteligencia de los tres países habían estado rastreando las actividades clandestinas del líder de los Zetas durante mucho tiempo, pero no pudieron actuar antes debido a su evasividad y frecuentes viajes, lo que dificultaba su seguimiento.
La operación policial se llevó a cabo en un momento estratégico, justo antes de una transacción inminente de drogas y dinero entre el líder de los Zetas y un conocido narcotraficante colombiano apodado “El Repetido”, uno de los trillizos bien conocidos en Colombia por sus actividades ilegales.
Punto de investigación
La investigación se centró inicialmente en el líder de los Zetas en Europa, un ciudadano de origen marroquí llamado Said, quien vivía de manera nómada y respondía directamente a las órdenes de la cúpula de los Zetas en México, aunque tenía su residencia en la capital. A medida que avanzaba la investigación, se identificaron a otros miembros de la organización y sus roles, además de descubrir cómo el líder colocaba personas de confianza en toda la nación y en Europa, específicamente en Países Bajos.
El jefe de la organización mantenía una gran cantidad de reuniones constantes con diversas personas, lo que dificultaba la labor policial para determinar cuáles eran relevantes para la investigación. Sin embargo, en los últimos meses, incrementó las medidas de seguridad y aumentó el número de reuniones, lo que alertó a los agentes de que podría estar en la fase final de una importación de cocaína, como así fue.
Durante las detenciones, no se encontraron armas de fuego y los presuntos narcotraficantes no opusieron resistencia. En la actualidad, están bajo custodia policial a la espera de declarar ante el juez instructor de la causa, quien ocupa el segundo puesto en la ciudad de Alcobendas, Madrid.”
