Dos sacerdotes y un civil fueron ejecutados la comunidad de Cerocahui, ubicada en el municipio de Urique, en la sierra Tarahumara de Chihuahua.
Los primeros reportes indican que el civil llegó al templo de la comunidad herido por arma de fuego en busca de refugio, pues lo perseguían los sujetos armados que le habían disparado.
En las inmediaciones del templo, los presuntos responsables abrieron fuego contra el civil y contra los sacerdotes Javier Campos Morales y Joaquín Mora Salazar.
Como ocurre en estos casos, el gobierno de Chihuahua se limitó a condenar y lamentar “los hechos violentos ocurridos en los que dos religiosos se convirtieron en víctimas circunstanciales”.
Informó que se activaron los mecanismos de coordinación con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Guardia Nacional para brindar seguridad a los pobladores del lugar y una línea especial en el número de teléfono 911 para personas que tengan familiares en el poblado y necesiten información.
