Generalmente, pasamos gran cantidad de tiempo en nuestra recámara no solo durmiendo, sino también jugando, estudiando e incluso trabajando. A raíz de esto, muchas veces podemos llegar a cansarnos de ella, tanto de su disposición como de su decoración.
Sin embargo, la renovación de una habitación puede implicar un gran movimiento. Dependiendo de lo que estemos dispuestos a realizar, tendremos que pintar las paredes, colgar cuadros o incluso conseguir nuevos muebles para la recámara.
En esta ocasión, compartimos algunos consejos de decoración para renovar nuestra habitación y obtener un lugar más acogedor, donde disfrutemos todo el tiempo que pasamos allí.
Guía básica para modernizar nuestra recámara
1. Actualizar la cama
Uno de los muebles de recámara más centrales es la cama. No importa el tamaño que tengamos, darle un toque renovado no es tan complejo. Podemos comenzar por comprar cabeceras para cama, por ejemplo.
Las cabeceras son un gran accesorio para la cama, ya que no solo aportan comodidad y respaldo sino un toque de elegancia y distinción. Existen cabeceras matrimoniales, de una plaza y media y para camas individuales.
Además de las cabeceras, podemos comprar un edredón o incluso agregar almohadones nuevos, que otorguen frescura y nuevos colores a nuestra habitación. También, podemos pintar nuestra cama y darle un nuevo estilo, acorde con la renovación.
2. Reducir los muebles para recámara
Muchas veces acaparamos en nuestra habitación demasiados muebles, dificultando la circulación e incluso recargando nuestra visión. Es hora de deshacerse de aquellos muebles para recámara que no sean imprescindibles.
Debemos conservar, en primer lugar, la cama, ubicada en un lugar central. Si tenemos una cabecera matrimonial o individual, podemos aprovechar para apoyar la cama sobre una pared, liberando mayor espacio de circulación en la habitación.
Luego, podemos quedarnos con una mesa de luz pequeña y algún lugar para guardar nuestra ropa. Si queremos tener la PC en la habitación, podemos agregar también un escritorio con una silla cómoda, en consonancia con el resto de muebles para recámara.
3. Renovar la decoración
Si ya estamos hartos de nuestro cuarto, seguramente la decoración tenga mucho que ver. Por eso, es muy importante enfocarnos en darle a nuestra recámara un aire nuevo, especialmente desde el punto de vista visual.
En el caso de que tengamos pósters o láminas colgadas en nuestras paredes, podemos probar con quitarlos, en un principio. Luego, una nueva mano de pintura en la pared nos ayudará a renovar la frescura del cuarto, e incluso sumar un toque de color si nos agrada.
Finalmente, una vez que los muebles para el cuarto están ubicados en su lugar, es hora de sumar algunos elementos nuevos. Podemos volver a colgar láminas o pósters en las paredes, agregar marcos con fotografías e incluso incorporar alguna planta de interior para un toque natural.
Comenzando por estos simples pasos, podemos renovar nuestra habitación de manera sencilla y darle un toque fresco y renovado. De esta manera, seguramente disfrutaremos más el tiempo que pasemos en la recámara, ya sea descansando, jugando o estudiando.
