El ejército de Corea del Sur se disculpó después de que un misil que lanzó durante un simulacro el martes falló y se estrelló contra el suelo, lo que provocó alarma entre los residentes cercanos que pensaron que estaban siendo atacados por Corea del Norte, que había lanzado un misil de prueba ese mismo día.
Se suponía que el simulacro de fuego real, que involucraba a Corea del Sur y los EE. UU., era una demostración de fuerza de los aliados, horas después de que el Norte enviara un misil de alcance intermedio sobre el norte de Japón.
En cambio, terminó en vergüenza cuando un misil balístico Hyumoo-2 de corto alcance se estrelló contra el suelo dentro de una base de la fuerza aérea cerca de la ciudad costera de Gangneung en Corea del Sur.
Aunque el misil no explotó, el ruido y el fuego posterior hicieron que algunos residentes de Gangneung creyeran que Corea del Norte había lanzado un ataque, según informes de prensa. No hubo reportes de lesiones.
El ejército de Corea del Sur reconoció el accidente horas después de que los usuarios de Internet publicaran videos que mostraban una bola naranja de llamas que emergía de un área que describieron como cerca de una base de la fuerza aérea de Gangneung.
El ejército dijo que estaba investigando qué había causado el “vuelo anormal” del misil de Corea del Sur, una parte clave de sus estrategias de ataque preventivo y de represalia contra el Norte.
El accidente ocurrió cuando los militares de Corea del Sur y EE. UU. dispararon una ráfaga de misiles hacia el Mar del Este, también conocido como el Mar de Japón, en respuesta a que Corea del Norte disparó un misil balístico sobre Japón por primera vez en cinco años.
El estado con armas nucleares lanzó un misil balístico de alcance intermedio que voló una distancia récord de 4.600 km (2.850 millas) a una altitud de 1.000 km, en su demostración de armas más provocativa en años.
Ese rango pone al territorio estadounidense de Guam en el Pacífico, hogar de las bases militares estadounidenses, a una distancia sorprendente. El misil aterrizó en el Océano Pacífico a unos 3.200 kilómetros al este de Japón.
El gobierno de Japón emitió una alerta instando a los residentes a ponerse a cubierto cuando el misil pasó sobre la isla principal más al norte de Hokkaido y la prefectura de Aomori.
